29 de Agosto 2016 Etapa 18 día 19 del Camino de Santiago de Compostela
Día de despedidas y reencuentros, de respirar el aire de León, de quedarme en una ciudad por más de una noche, día de entender que nada es permanente, que todo es transitorio…
Ayer me encontré con J, fue especial volverlo a ver, y encontrar de nuevo su mirada que me encanta, con esos ojos azules profundos, intensos y oscuros. Sentí la necesidad de decirle muchas cosas bonitas y cariñosas que me inspiraban al verlo, pero nuevamente preferí ir más despacio. Step by step.Calle de la Sal en León España
Ese domingo recorrimos el casco antiguo de la Ciudad de León, él se auto proclamó mi guía turístico en la ciudad, caminamos primero por el barrio romántico y luego por el barrio húmedo, delimitados por la plaza y la imponente catedral de León que ocupaba la manzana completa. Mientras caminábamos él me hablaba de cosas graciosas, analogías acerca del nombre de los barrios y la relación de esos nombres con nosotros… a él lo divertía, a mí me ruborizaba… ¿Qué puede tener de parecido lo romántico con lo húmedo en nuestra relación? Seguro que para él una connotación sexual… Le causaba mucha gracia ver cómo me ruborizaba… Yo cómo siempre me hacia la que no entendía nada… entre risas y risas me besaba, me tomaba de la mano, me abrazaba, y yo me dejaba; era material disponible para mimos y cariños. Además estábamos en el lugar perfecto para vivirlo y disfrutarlo.
Mientras caminábamos por los barrios me iba explicando un poco de la historia de esta ciudad. Con solo oírlo me daba cuenta como le apasionaba hablar acerca de la historia.
Los dos barrios a simple vista son parecidos, calles estrechas, antiguas y empedradas, muy muy íntimas…Con la diferencia de que en el barrio húmedo las calles tienen más vida, más restaurantes y muchos bares con mesas afuera adornadas con turistas, botellas de vino, copas y muchos tapeos. En cambio el Barrio Romántico es un poco más solitario, sin tantas personas caminando por sus calles, pocos restaurantes, se percibía el silencio. Parecían dos hermanos Gemelos, físicamente similares pero con un carácter diferente.
Luego de un rato nos sentamos en un bar para tomar algo y hablar, pido un vino tinto, él me recomienda un vino dulce, le respondo que prefiero los secos, me dice que por la hora vendría mejor uno más dulzón, aun así ordeno un rioja más seco y continuamos con la conversación. Mientras doy el primer sorbo, veo cómo cambia de aspecto su rostro, se pone un poco más serio de lo normal. Entonces toma la palabra.
-Decidí terminar mi camino hoy, no voy a continuar.
– Mañana viajo de regreso a casa.
¿WTF?
Me tomó por sorpresa su noticia pero de alguna manera lo imaginaba. Se había enfermado en el camino, lo habían tenido que cuidar unas monjas, tal vez se sintió solo en ese momento, puede ser que necesite del cariño de las personas cercanas a él.
Aun entendiendo la causa de terminar su viaje, quería seguir compartiendo con él, quería conocerlo más, así que traté de disuadirlo para que no se vaya y continúe el camino…
Me explicó que se había sentido muy mal cuando se enfermó, que no era correcto continuar el camino cuando ya había tomado un bus y había adelantado varias etapas, que prefería retomarlo el siguiente año en primavera, con una mejor mochila y un poco más preparado.
Iba a viajar de regreso a casa desde el momento en que se enfermó.
Le pregunté por qué no me había contado días atrás acerca de su decisión, por qué no se había ido?
-Quería volverte a ver y por eso retrasé mi regreso hacia Alicante. -Responde él con un tono de voz más bajo y expectante.
En ese momento comprendí que los amores de viaje, no se dan a largo plazo y recordé mi promesa a la mañana cuando me levanté: “Hoy voy a vivir el presente sin pensar en nada más que disfrutar de hoy”
Compartimos hasta el último minuto juntos, nos regalamos muchas sonrisas y cariño, además agradecí haberlo conocido en el momento justo y despedirlo en un momento injusto…
Hoy a la mañana salí temprano a desayunar, era extraño este Lunes para mí, primero que nada porque me iba a quedar en un lugar más de una noche, cuando ya estaba acostumbrada a dormir en ciudades diferentes todos los días, asimismo me sentí extraña, nuevamente había tenido que despedir a alguien con quien me había acostumbrado a compartir, alguien a quien le estaba tomando cariño.
Recordé cuantas personas había conocido en el camino y de cuantas me había despedido, parecía un ejemplo de la vida misma, pero en una versión más acelerada.
Entonces me puse a pensar… y apareció otra versión en mi cabeza, “Angélica Versión 2” también la llamo, subconsciente, ansiedad Personaje Limitante. A esta versión la conozco bien, de hecho le tengo un apodo, se llama “Pelusa”
No sé si les pasa como a mí, pero yo soy de las personas que trato de estar ocupada todo el tiempo, evitó el silencio mental el 90% de las veces porque me incomoda, porque me acostumbré a no pensar Ej: cuando estoy en casa sola, escucho música, leo un libro, veo TV o hago una siesta. Pero en silencio sentada en el living sin escuchar música, sin meditar, sin hacer nada de nada, solo pensar? No duró ni 10 segundos, porque empiezan las preguntas, porque “Pelusa” empieza a reclamar que la tengo olvidada y que es necesario escucharla…
-Ahhh que bueno Angie apareciste por acá. Ya me tenías olvidada, como casi nunca te veo… tengo varias preguntas para ti a ver cómo las resolvemos…
– My God- pienso- Que Intensa que es Pelusa… déjame en paz que ahora no quiero pensar ni resolver nada.
Ahí es cuando me habla en voz más alta y con un ritmo acelerado/ansioso para que la escuche.
–Qué vas a hacer con tu vida? Recuerdas lo de tu trabajo? Qué vas a hacer? Cómo van los Ahorros? Tú eres buena vida, será que nos alcanza el dinero para este viaje tan largo? Será que conviene ir de regreso a Buenos Aires o volver a Colombia? Y qué pasa con el Amor? Se acabó tu relación? Vas a volver a ver al chico de los ojos lindos? Y qué pasa con L?
Y continúa escupiendo sus pensamientos aún más profundo “Angie me estoy sintiendo sin ninguna raíz acá, Angie como que no tengo nada que me aferre a nada, eso me asusta… ¿Cuál es tu objetivo? Seguimos con los mismos planes? Angie estamos en el momento justo para hacer lo que queremos, no hay nada que nos ate, eso está bueno? Pero que queremos? Por lo menos definamos un lugar Geográfico no? Y Así “Pelusa” me deja sin aire, la única respuesta que nos podemos dar es: No tengo idea hoy, pero tranquila que ya se me ocurrirá algo… solo disfruta de esto…
Pelusa decide creerme y por fin se queda en silencio.
Seguí caminando por la plaza de León frente a la Catedral y me encontré con un monumento que llamó toda mi atención.
Un niño y su padre. Lo que me da más curiosidad es por qué El Niño mira para el lado opuesto de la catedral, cuando lo asombroso de este lugar es justamente lo que está en frente, esa Magnánima Catedral de Estilo Gótico del año 1200. ¿Qué habrá querido expresar el artista? ¿Por qué me llama la atención este monumento? Me siento identificada con el Niño, lo que llama mi atención con relación al niño es su mirada no a lo obvio, sino justamente a lo opuesto. Será que el artista usa al niño cómo una conexión con las personas que visitamos el lugar? Una invitación para mostrarnos algo? El padre como símbolo de compañía y maestro de su hijo que con cariño lo abraza. O será la representación del artista en dos etapas diferentes de su vida, de él mismo como un adulto abrazando a su niño interior y mostrando en la catedral algo que solo puede tener un significado importante para el mismo?
Seguí caminando sintiéndome libre, flotando como una pluma en el viento, sabiendo que no tengo nada, que nada me pertenece, que no debo dar nada por hecho (Esa lección fue una de las primeras que me dio este camino a la semana de andarlo) y mientras seguía caminando iban apareciendo muchas personas que no veía dos días atrás, todos amigos del camino, ellos llegaron hoy a la ciudad. Es curioso estar en un lugar al otro lado del océano, otro continente, y que tanta gente te conozca como si fueras residente de acá.
Algunos me preguntaron si había recuperado mi cámara, otros me decían que yo tenía un estado físico excelente para haber recorrido 40 Kilómetros en un día cuando ellos habían recorrido 20km en dos días, otros me invitaron a acompañarlos a cenar, a todos les sonreí, les respondí que si a sus planes y disfruté hasta la última gota de ese día con ellos.
Antes de dormir recordé que fue un día de despedidas y reencuentros.
Buen Camino J!
Si quieres hacer el Camino de Santiago y necesitas mas información, Clic Aquí
Para leer sobre la etapa anterior clic aquí